Capítulo 12

Horas se horroriza al ver que una joven está apunto de ser violada. No sabe que es la muchacha de la que siempre le hablaba su hermano ni tampoco que es la hija del hombre que le gusta. Justo en el momento que un agresor iba a penetrar a la joven, Horas aparece en escena:
--¿¡¡qué mierda estais haciendo?¡
Samantha respira alivio. Su agresor se guarda su arma mortal. Mientras unos la sujetan a Samantha los otros  se enfrentan a Horas.
--¿¿¡y tu que quieres? ¡¿¿qué pasa es que tienes envidia?
Uno lo agarra por la espalda y los otros  le dan puñetazos y patadas. Lo derrumban facilmente. Se le ríen:
--ahora contemplarás como violamos a la guarra. Va a disfrutar como nunca lo soñó. Va a querer repetir.
Samantha está desesperada. En seguida, Horas ya contaba con eso, llegan sus escoltas. Entonces los ocho chicos desaparecen. Mientras uno lo siguen los otros dos se ocupan de Samantha y de Horas. El chico, muy lastimado:
--ya era hora ¿no?
La chica lo mira con timidez:
--gracias.
--¿no te hicieron nada? --Horas.
--no, gracias a ti.
Los dos jóvenes están muy alterados. Mientras van al lujoso auto uno de los escoltas le pide a Samantha su dirección para llevarla a su casa.
--¿van contigo?
--si, son mis escoltas.
--¿y como es que tienes tantos escoltas? Mi padre también me quiso poner escolta pero me escapé.
--pues debiste hacer caso a tu padre.
--¿eres importante?
Con timidez Horas dice:
--bueno, mi madre... un poco... Es la Presidenta.
Samantha lo mira sorprendida:
--vaya, que honor conocer al hijo mayor de la Presidenta. Sabes, mi padre...
Samantha no se puede presentar ya que es interrumpida por los escoltas que han intentado buscar a los chicos. No los han encontrado. Mientras se dirigen a casa de la joven tratan de convencerla para que haga la denuncia.
--para qué --dice ella-- la policía sólo haría algo en caso de que me hubieran violado...
La joven llora. Horas la acaricia.
--ya todo pasó.
Samantha se refugia en aquel joven sin saber que él está enamorado de su padre. Horas la besa en la mejilla:
--espero que nos sigamos viendo.
Samantha lo mira y suspira:
--guapo como su hermano pero más hombre.
Pese al mal rato que ha pasado haber conocido a Horas ha sido muy importante para ella. Zack la espera angustiado. Ella tiene heridas y la ropa rota lo que no deja dudas a lo que ha pasado.
--¿¿¡que te han hecho, hija?¡
El hombre está muy sofocado.
--nada --dice ella.
--¡¡no me mientas¡
Samantha mira a su padre con reproche:
--¿¿tú sabías que me iban a intentar violar?¡
Zack se lleva las manos a la cabeza, tiene los ojos inyectados en sangre.
--te...
No es capaz de decirlo.
--No, me salvó el hijo de la Presidenta.
--¿¿qué?
--Se apareció como de la nada. Si no hubiera sido por el hijo mayor de la Presidenta, esos desgraciados me hubieran violado.
Zack estaba muy sorprendido:
--¿Horas?¿qué hacía allá?
--No le pregunté. Llegó de repente, le golpearon brutalmente, por suerte llegaron sus escoltas ¿tú sabías que yo estaba en peligro?
Zack está muy angustiado. Aturdido. El intento de violación de su hija, que haya sido precisamente Horas quien lo evitara.
--por favor hija, duchate y que tu madre no se entere de esto. Yo te aseguro que nadie te volverá a lastimar.
Samantha ve un gran dolor en el rostro de su padre:
--¿ocurre algo?
Zack fuerza una sonrisa, le da un beso a su hija en la frente:
--todo bien tranquila. Ahora déjame solo.
Cuando oye el ruido de la ducha, Zack toma su móvil. La voz de Apatero suena al otro lado de la linea:
--¿le gustó el regalo a la zorra de tu hija? --pregunta con ironía.
Zack está muy alterado. Tiene que hacer un gran esfuerzo para no gritar alto, no quiere que su familia se entere de nada.
--¡¡es usted un maldito desgraciado¡¡
Las risas de Apatero lo enfurecen:
--¡¡sí ya me enteré que le fallé el estreno, pero no para la proxima¡
Zack mataría a quien lastimara a su hija. Piensa en Horas:
--lo siento, no te lo mereces--dice para sí.
Decidido dice:
--mañana tendrá su video pero si usted toca a mi hija lo mato.
--si tú te acuestas con el hijo de la Presidenta no pasará nada.
--¡¡mañana tendrá el maldito ¡
Le da pena ya que sabe que no es justo para con Horas.
--mi hija es más importante.
Se mete en el bolsillo una minicámara y sale decidido a acabar con este asunto.

Horas sale del baño. Está totalmente desnudo. Se sorprende al encontrar a Zack. Aunque es un joven muy atractivo, Zack en ese momento no tiene cabeza para el placer.
--¿¿qué haces aquí?¿cómo has entrado?
Zack sonríe, su mirada es fría.
--tengo mis influencias... --hace gesto de dinero.
--¿ocurre algo?
--te quería dar las gracias por lo de esta noche. Le has salvado la vida a mi hija, sin ti ahora estaría desgraciada.
--¿tu hija?
--Si, Samantha. Me contó que gracias a ti no la violaron.
Horas está perplejo. No sólo no sabe que pensar de que el hombre que le gusta tenga una hija sino que él la haya salvado.
Zack lo acaricia. Por unos segundos se muestra dulce:
--mira como te dejaron.
Horas cierra los ojos mientras que Zack lo besa con pasión. Horas se derrite y se funde en sus brazos. Zack lo tiene bajo su dominio y aunque le da pena se aprovecha de eso.