miércoles, 10 de junio de 2020

Capítulo 20


Ronaldo y Kathy están desnudos en la cama. Ella no deja de chupar la herramienta sexual de él.
--para ya, me vas a matar --jadea él.
Ella levanta la mirada:
--otro más.
Ronaldo sonríe:
--¿Otro? ¿sabes cuantos llevamos? Hace horas que estamos en la cama ¿es que tú no te cansas nunca?¿¿es que siempre eres así con todos tus amantes?
Kathy se sube la pecho de él, lo abraza con fuerza:
--Nunca un hombre me había llenado tanto... Cuando te miraba en las fotos que tiene mi hermano en su cuarto deseaba que pasara esto y es que ahora, quiero llenarme de ti.
Él la mira con orgullo:
--¿más? me has vaciado --dice divertido.
Ella lo quiere besar:
--no, ahora no que me has tocado --dice él divertido mientras la muerde en el cuello.
Ella apoya su cabeza en el pecho del fornido futbolista:
--mi hermano que tanto hablaba de ti, él te admira mucho. Tiene grabado todos tus partidos, a mí no me gusta el fútbol pero me encantaba mirar tus fotos. Mi hermano tiene muchas.
--¿ah sí? es homosexual ¿no?
--sí pero eso no tiene nada que ver. Te admira como deportista.
--eso está bien.
--Yo te veía como un símbolo sexual, tenía tantas ganas de conocerte.
Él le da un beso cerca del labio.
--te juro que nunca un hombre me había sentido así. Antes sólo había estado con un hombre --dice ella muy aferrada.
Ronaldo le va acariciando la cabeza:
--¿en serio quieres que te crea eso?
--¿porqué no vas a creerme?
Ronaldo sonríe seductor y con ironía dice:
--porqué sin conocerme, sin interesarte lo que hago te has metido en mi cuarto sólo para acostarme contigo.
--¿crees que soy una cualquiera?
Él sonríe:
--¿importa eso ahora?
--Me gustaría saberlo.
Kathy nota que el aparato sexual de él empieza a levantarse de nuevo:
--pero puedo esperar.
Ella misma se clava en él rompiéndose de placer. Sin fuerzas Ronaldo acepta a gusto esa "tortura" sexual. Le encanta que la chica sea tan apasionada, que no tenga nunca suficiente de él. Todas las chicas lo hacen sentir deseado pero es que Kathy se pasa. Llevan ya bastante rato con lo mismo, él se mueve poco pero Kathy no necesita más. Ella se mueve sobre el arma de él que recibe como un dulce caramelo que saborea y que le ofrece un cálido y sabroso placer.

Por otro lado, la noticia del accidente de Horas, de la reacción de Zack está en todos los noticieros. A Samantha le impresiona mucho escuchar a su padre decir a otro hombre que lo ama, al tío del hijo que lleva en su seno. Sin contar que se estaba empezando a sentir atraida por Horas. Se acaricia el vientre mientras le habla a su bebé con tristeza:
--espero que seas niña. Los hombres crean demasiado problemas.

En la clínica en la que lo han atendido, Horas está en medio de las escaleras. La Presidenta lo mira autoritaria:
--Horas, no me hagas esto. Después de todo lo que ha pasado no te puedes ir con él.
Zack está en el auto. Lo mira enamorado. Sabe que no es fácil para él. Con la mirada trata de decirle tantas cosas. Zack está seguro que Horas no se atreverá a jugarse por él, a enfrentarse a su madre.
--¡Ven aquí, Horas¡ No te lo voy a repetir --dice la Presidenta.
La prensa está atenta a todos los movimientos del hijo de la Presidenta seguros de una buena exclusiva. Horas mira a su madre, a Zack.
--Lo siento --dice.
Zack se queda triste, ya se da cuenta que Horas elegió quedarse con su madre. No le dice nada, lo mira con cariño. Con la mirada le dice, lo comprendo. Horas sigue hablando:
--pero lo amo, quiero vivir a su lado. Quiere estar con él, quiero intentarlo con él.
Zack se ha quedado de piedra. Horas corre a sus brazos. Los escoltas de la Presidenta lo quieren retener pero ésta dice:
--dejenlo, él ha tomado su decisión.
Es una decisión que a ella no le gusta pero que la acepta. Zack y Horas se abrazan. Se sonríen.
--sacame de aquí --le dice Horas.
Antes que la prensa se les eche encima, Horas y Zack se meten en el auto y se van veloces. Los periodistas se dividen. Uno los persiguen a ellos y otros se acercan a la Presidenta.
--¿va a aceptar al señor Macdonald como pareja de su hijo?... ¿vivirán con usted en la Casa Presidencial?
Mientras los escoltan la protegen, la Presidenta dice:
--Mi hijo tiene mi apoyo haga lo que haga.
Por otro lado los amantes escapan como dos fugitivos. Se miran enamorados.
--no esperaba que hicieras todo esto por mi --dice Zack emocionado.
Horas le sonríe:
--¿el qué?
Con una mano en el volante y con otra en su muslo le dice:
--pues todo. Salvarme la vida, jugarte por mi. No esperaba que te enfrentaras a tu madre.
--deberías saber que no le temo a nada.
--si, ya lo vi.
--Te amo.
Sonrien. Los dos se mueren por besarse pero prefieren ir a la carrera para que la prensa no les dé alcance
--después de todo lo que pasó entre nosotros  no sabía que pensar --dice Zack.
--fuiste el primer hombre en mi vida, el único. Me dio mucho coraje lo que me hiciste pero me dolió lastimarte.
--ya olvida eso. Me lo merezco, aunque me gustaría explicarte porqué lo hice.
--No hace falta, supongo que sería por dinero.
--No, no es por dinero. Hace algún tiempo que a mí me hicieron algo parecido a lo que te he hecho.
--¿en serio?
--Un chico con el que estaba se empeñó en grabar un video. A mí me hizo gracia. Resulta que le vendió el video a mi jefe.
--¿a Apatero?
--sí, él no me dijo nada. Me tendió una trampa. Te confieso que siempre me han gustado los chicos jóvenes, ya antes había estado con chicos jóvenes.
Horas lo mira algo sorprendido, con celos.
--pero tampoco niños. Siempre de 18 o almenos lo aparentaban, tampoco quiero que pienses que soy un pervertido.
--nunca te volveré a juzgar aunque me hace sentir inseguro. No sé si me amas en serio o es porque soy joven.
Zack lo mira con cariño:
--te jugaste por mí, dame la oportunidad de demostrártelo.
Horas le aprieta la mano y se miran con cariño:
--nada me gustaría más.

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